Desayuno infusiones. Mamá dice que curan.
No puedo comer. Los nervios han anidado en mi estómago y han dejado heridas.
Abiertas y sangrando.
Mi cuerpo es un montón de heridas. Todas tienen nombre. Todas están siempre abiertas.
Lo que ocurre es que el tiempo pasa y ya no sangran y simplemente las heridas permanecen ahí, abiertas y secas, recordando. Recordándome qué pasó, qué hice mal.
El sufrimiento es opcional. Mentira.
No hay comentarios:
Publicar un comentario