viernes, 26 de agosto de 2016
Lo estás haciendo bien.
Arranca, me da igual a donde vayas, me voy contigo. ¿Puedo subir el
volumen? Me encanta esta canción. Ve por la playa, echo de menos el mar,
hace tres días que no lo veo. ¿Te dije qué me pasó ayer? Me dormí con
las gafas puestas y el libro abierto sobre el pecho. Por la mañana me
dolía todo. ¿Qué fue lo último que leíste? «Cien años de soledad» me
está encantando. ¿Te acuerdas de cuando era pequeña y cada año subíamos a
la sierra para ver la nieve? Lo echo de menos. Estos años han pasado
tantas cosas que ya no tenemos tiempo para pararnos y disfrutar. Te noto
cansado, papá. ¿Hace cuánto no descansas de verdad? Todo es demasiado,
parece que los problemas nunca dejan de aparecer. Ojalá pudiera cambiar
las cosas, ojalá pudiera hacer algo. Nos peleamos mucho últimamente; es
el cansancio y mi adolescencia tardía. No me hagas mucho caso y
perdóname. Aunque tú también eres demasiado terco. Supongo que en eso
nos parecemos mucho. Dice mamá que somos iguales. Creo que tiene razón.
Estoy orgullosa de ti, papá. Lo estás haciendo bien, de verdad.
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leerte es leerme y qué bonito.
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